En el sistema económico todo está relacionado. Si se sigue usando el carbón para producir energía, las renovables no se desarrollarán tan rápido como sería conveniente. En cambio, si se prohibiera seguir usando el carbón, no habría más remedio que impulsar las renovables con mucha más decisión a como se está haciendo en la actualidad.
La organización Greenpeace lo sabe y por eso protesta por el uso de esta fuente de energía contaminante. En Estados Unidos, cinco de sus activistas han sido detenidos por escalar la planta de generación de carbón de Bridgeport Harbor, una acción que es su forma de exigir que la planta sea cerrada y que el carbón deje de ser el combustible para la generación de electricidad.