Chile vive una terrible sequía. La situación ha llegado a tal punto que, en algunas regiones, que suman casi un centenar de localidades, peligran los cultivos de manera irreparable. Por ello, el ministro de Agricultura, Luis Mayol, ha llevado a cabo medidas cuando menos originales, como la siembra de nubes con yoduro de plata para esas zonas, por un coste total de 20 millones de pesos.
Según los expertos, esta medida aumentará entre un 15 y un 30% las precipitaciones. Ya se han llevado experiencia parecidas en Estados Unidos, Australia, Israel y China. Tanto agricultores como exportadores de los productos agrícolas chilenos esperan que la medida sirva de algo y les salve de la ruina. Pero hay otras acciones para luchar contra la sequía de forma más eficiente. En fin, para combatir los terribles efectos perniciosos del fenómeno meteorológico conocido como La Niña, hay que impulsar la imaginación.
El otro método del que hablamos es capaz de purificar el agua más sucia hasta dejarla en un 99,9% limpia. Así, se puede usar tanto para uso humano como para riego de los cultivos. La máquina es de invención suiza y en Chile la comercializa Swiss Water System. Esta máquina es capaz de filtrar 120.000 litros cada día.
El funcionamiento de este dispositivo tiene un coste cecano a los 500 millones de pesos y ya ha sido probada con éxito en 35 países desde hace doce años. Si comienzan a funcionar y tiene éxito, puede ser la salvación de miles de hectáreas de cultivo en Chile, lo que estanto como decir la salvación de cientos de personas que dependen de la agrucultura y del agua como principal medio de vida. Muchas cosechas peligran después del duro trabajo llevado a cabo por los agricultores. La sequía se puede combatir con imaginación y con tecnología.
Y, por si fuera poco, funciona con energía solar, limpia y renovable.