Vatnajökull es la mayor extensión de hielo de Islandia y una de las mayores de Europa: en total, 8.100 kilómetros cuadrados. Se encuentra en el sudeste del país y cubre más del 12% de su superficie. Es el mayor glaciar de Europa en volumen (unos 3.000 kilómtetros cúbicos) y el segundo en área, sólo superado por Austfonna en Nordaustlandet, en Noruega.
El espesor promedio del hielo es de unos 400 metros, llegando a un máximo de 1.000 metros. En el sur este gran glaciar, se encuentra el volcán más elevado de Islandia, Hvannadalshnjúkur, a una altitud de 2.100 metros. En 2008, Islandia comenzó un proyecto para conservar la naturaleza de esta región y creó el Parque Nacional de Vatnajökull, donde se pueden ver glaciares emisarios, cascotes de hielo dinámicos, energía geotérmica y actividad volcánica subglacial, con sus consecuentes riadas. En definitiva, un espectacular paisaje natural único en el mundo.
En el parque hay zonas de gran valor ecológico, como los parques nacionales de Skaftafell y de Jökulsárgljúfur, el páramo de Lónsöræfi y el glaciar Vatnajökull. El parque es el proyecto más importante de conservación que Islandia haya lanzado jamás. Pero, además, es uno de los planes económicos y rurales más ambiciosos desarrollados por el Gobierno islandés.
Los turistas pueden observar la cultura y la historia de las comunidades que se han formado alrededor del glaciar, que han aprendido, durante siglos, cómo aprovechar este ambiente extremo. También es un lugar único para la investigación y el estudio de los fenómenos climáticos.
Se pueden ver lenguas glaciares derivadas hacia los márgenes oeste, norte y noreste que alcanzan altitudes de 600 a 800 metros sobre el nivel del mar. El punto más profundo bajo el glaciar alcanza los 300 metros bajo la cuenca glaciar del Skeidarajökull.
La precipitación de nieve anual varía entre los 4 y los 70 dm. El mínimo se produce en el extremo sur y va aumentando paulatinamente hacia el norte.