Un nuevo estudio ha revisado informes de emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) de los últimos cincuenta años y ha cotejado los datos de tales emisiones con los de las concentraciones crecientes de CO2 en la atmósfera de la Tierra durante ese periodo tiempo.
Los resultados de la investigación muestran que, en los últimos cincuenta años, las emisiones de CO2 se habían cuadruplicado, mientras que los sumideros naturales de carbono que atrapan al CO2 tan sólo duplicaron su captación. Las cuentas, por tanto, están claras: se emite mucho más carbono del que se captura.
Estos sumideros naturales de carbono han aumentado de modo notable su absorción de dióxido de carbono y, por tanto, han disminuido las consecuencias climáticas potenciales de la emisión de tanta cantidad de CO2 a la atmósfera. Pero ese incremento en la absorción de CO2 no es suficiente para aguantar el ritmo creciente de las emisiones de CO2.
La investigación ha sido elaborada por el equipo de Ashley Ballantyne, Jim White y Caroline Alden, de la Universidad de Colorado en Boulder. También han participado John Miller y Pieter Tans, de la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos). El trabajo ilustra el ingente trabajo que está realizando la naturaleza para absorber el gas de efecto invernadero, pero también está claro que esa capacidad de absorción tiene un límite. Dicho de otra forma, no sólo hay que aumentar la captura de carbono, sino, sobre todo, hay que reducir las emisiones. No hay otro camino si queremos evitar las consecuencias catastróficas del cambio climático o, pero aún, llegar al punto de inflexión.
Por otra parte, hay que señalar que sumideros naturales de CO2 no son sumideros a través de los cuales el carbono se elimina para siempre. Ese carbono todavía está presente en la vegetación, el subsuelo y el mar. No desaparece, sino que está inmovilizado fuera de la atmósfera. Retenido.
El CO2 en la atmósfera se ha incrementado desde aproximadamente 280 partes por millón (ppm) justo antes de la Revolución Industrial hasta aproximadamente 394 partes por millón en la actualidad. Pero lo peor es que la velocidad del aumento se está acelerando. Se teme que el promedio global de CO2 atmosférico alcance 400 ppm para el 2016, según los cálculos de algunos científicos.