Para una adecuada movilidad sostenible, hay que usar el transporte público. Pero si éste es menos conaminante, aún mejor. Es lo que han pensado en Zaragoza, que comenzará a usar un autobús híbrido en una de sus líneas de autobuses urbanos, convirtiéndose en el primer vehículo de este tipo que circula por España.
De momento, estará en período de prueba unas semanas. Fernando Gimeno, vicealcalde de Zaragoza, ha explicado que, además de suponer un paso más en la movilidad sostenible de la ciudad, es un medio de transporte que tiene un mantenimiento más económico.
La empresa que ha fabricado el chasis de este vehículo es Tata Hispano, mientras que el sistema energético ha sido responsabilidad de Tata Motors. El autobús permite un ahorro de combustible cercano al 35%, con la disminución equivalente del dióxido de carbono que supone. Además, es menos ruidoso porque el vehículo carece de caja de cambios.
El sistema de tracción instalado en el autobús consiste en varios motores eléctricos que reciben la electricidad de un motor diésel. Un generador produce electricidad, que se va acumulando en las baterías y alimenta los otros motores de tracción. El coste de inversión inicial es más alto que un autobús convencional, pero el coste de mantenimiento es menor a causa del ahorro que se produce durante la vida útil del vehículo. Por tanto, a la larga renta económicamente. Y, siempre, medioambientalmente
En cuanto a la autonomía es la misma que la de un vehículo normal, sólo que durante un 25% del tiempo (cuando las baterías de litio ya están cargadas) funciona en modo totalmente eléctrico. El autobús híbrido cubrirá la línea 40 de la ciudad de Zaragoza. Dentro, caben 29 personas sentadas, donde se incluyen cuatro para personas de movilidad reducida y una plaza para viajeros con sillas de ruedas. Cuenta con puertas eléctricas y con rótulos electrónicos para la señalización de las paradas.
Estoy muy a favor de esta iniciativa, es necesario reducir la cantidad de vehículos contaminantes, especialmente en el entorno urbano. No obstante, para largas distancias la incomodidad del autobús es un punto que no hay que olvidar. Como conductora creo que hay que seguir iniciativas en esta línea; una alternativa muy buena para desplazamientos en vehículo privado se encuentra en el «carpooling», compartir coche. Hay diversas webs gratuitas (viajamosjuntos.com, comuto.es, blablacar.com…) que apuestan por la reducción de CO2 y que contacta a viajeros con las mismas necesidades, permitiendo ahorrar emisiones y dinero. También se va imponiendo en trayectos directos por parte de Universidades y Ayuntamientos, lo cual es algo plausible. Ahí queda el dato.
Totalmente de acuerdo, Teruca.
http://www.ecologiaverde.com/ventajas-de-compartir-coche/