Diversos desastres naturales se están produciendo en los últimos tiempos en diferentes lugares del planeta. No es que sea algo inusual. En realidad, en casi todos los casos son fácilmente explicables y hasta se puede afirmar que se esperaban. Pero lo que extraña es que se están produciendo una gran cantidad de ellos en un espacio de tiempo muy limitado. Muchos en muy poco tiempo. Los últimos, el terremoto de Lorca en España, los devastadores tornados en Estados Unidos y la erupción de otro volcań en Islandia.
Respecto a los tornados, lo cierto es que la mayoría de los que se producen en el mundo lo hacen en una zona concreta: el medio oeste de Estados Unidos. Esto es así por las características climatológicas y orográficas de esa zona del planeta: se combina una inmensa zona intertropical sin ninguna cadena montañosa que sirva como protección física. De hecho, la zona se conoce popularmente como «el callejón de los tornados».
El tornado más devastador de la historia ocurrió precisamente en esa zona de Estados Unidos y es conocido como el Tornado de los Tres Estados, ya que recorrió parte de Misuri, Illinois e Indiana antes de desvanecerse. Recorrió una distancia total de 352 kilómetros. Los tornados suelen producirse en primavera, pues es un periodo de transición de un clima frío a un clima cálido y es esta circunstancia la que hace que se forme este fenómeno climatológico. Por tanto, no es raro que en las últimas semanas se produzcan tantos tornados en esa zona concreta de Estados Unidos.
El caso es que se han producido 124 muertes en la localidad de Joplin, en el estado de Misuri, a causa de un tornado. A lo que hay que sumar otros 750 heridos. La mayor parte de la ciudad ha quedado destruida. Las pérdidas económicas pueden llegar a los 3.000 millones de dólares (más de 2.000 millones de euros).
El Servicio Nacional de Meteorología de EE UU clasificó el tornado como de categoría 5 de la escala Fujita-Pearson, el nivel más destructor de dicha escala. Los vientos llegaron hasta los 320 kilómetros por hora. Puede convertirse en el tornado más letal en EE UU desde 1953. Las pasadas semanas se produjeron otros tornados en estados como Arkansas, Oklahoma y Kansas donde muchas casas han quedado totalmente derruidas.