Científicos de la ZSF (Zoological Society of London, Sociedad Zoológica de Londres) coordinarán un grupo de trabajo para salvar algunos de los corales más amenazados del mundo. A través de la organización Edge se creará una lista con los corales en peligro de extinción y se contratará a científicos de todo el mundo para que eduquen a las comunidades locales sobre la importancia de estos ecosistemas.
Las predicciones más pesimistas prevén que, debido al aumento de la temperatura del mar, la mayoría de los corales pueden llegar a extinguirse en los próximos 50 años.
Los arrecifes de coral no solo son increíbles paisajes marinos llenos de color y de vida. También protegen a las comunidades costeras de las tormentas y albergan a peces, crustáceos y otros animales, recursos alimenticios y económicos del ser humano y, en especial, de las comunidades locales. Diez especies de corales, las más amenazadas, serán las que recibirán las acciones de este programa.
Varios factores ponen en peligro la subsistencia de los corales. El más amenazante es el aumento de la temperatura del mar, que se puede comprobar a simple vista: los corales están sufriendo un proceso de blanqueamiento. Este fenómeno sucede a causa de la pérdida de células de algas llamadas zooxantelas, que impiden al coral realizar la fotosíntesis.
Aunque hay que señalar que existen otras amenazas, como son la acidificación de los océanos, el aumento de los niveles de dióxido de carbono de la atmósfera, el aumento de la intensidad y frecuencia de las tormentas y, como no podía ser de otra forma, la actividad humana (sobrepesca, contaminación, sedimentación, desarrollo costero…). Hacer frente a estas presiones locales por parte del hombre pueden mantener mejor conservados a los arrecifes el tiempo suficiente hasta que los gobiernos se decidan a hacer frente al aumento de la temperatura atmosférica y del aire.
Algunos de estos arrecifes de coral, como la Gran Barrera de Coral en el archipiélago de Chagos, al sur de las islas Maldivas y perteneciente a Gran Bretaña, existen desde hace 400 millones de años. Ojalá sigan existiendo otros tantos millones de años.