La gran dama de la moda británica pide una «revolución» contra el cambio climático


La septuagenaria Vivienne Westwood, gran dama de la moda británica, conecta de miedo con los nuevos tiempos. Ni corta ni perezosa, llegó y venció. No podía ser de otra manera, con esos bríos que se gasta la buena mujer en todas sus lides, incluidas las medioambientales. Demostró que sus 71 años no fueron obstáculo para subirse a la pasarela de una guisa epatante, quizás en demasía, para pedir una «revolución» contra el cambio climático en la presentación de su colección, en la London Fashion Week.

En el marco incomparable del majestuoso ministerio de Relaciones Exteriores británico, como dirían las crónicas más pulcras, la diseñadora, todo un referente de la estética punk, hizo explotar el escenario, figuradamente, por supuesto, con su inefable aparición.

Irrumpió en la pasarela en plan combativo, ataviada tal cual se la ve en la foto, si bien en un primer momento apareció envuelta en un sabanón oscuro que resultó ser la pancarta que alentaba a la Climate Revolution, literalmente.

Si ponemos el zoom en su rostro vemos que el hallazgo no tiene precio. Su cara llevaba dibujado un mostacho y un círculo negro alrededor del ojo, un disfraz que completó con unos pantalones cortos y una camiseta que rezaba el mismo mensaje animando a la revolución.

Así, antes de dar paso al desfile en sí, el correspondiente a su segunda línea, Red Label, puso la guinda a su aparición estelar empujando a los británicos a unirse a la lucha contra la reducción de los gases de efecto invernadero, los principales causantes del calentamiento climático.

«Antes teníamos una guerra de clases, ricos contra pobres. Ahora es idiotas contra ecoguerreros«, o activistas del ecologismo, espetó sin más miramientos. ¿Simple golpe de efecto promocional o activismo? Quizás ambas cosas, pero también es un hecho la constante defensa de causas ambientales de esta pelirroja de armas tomar.

Deja una respuesta