Los veranos húmedos del norte y el centro de Europa son causados por el calentamiento del Océano Atlántico Norte, según un nuevo estudio publicado en la revista Nature Geoscience realizado por la Universidad de Reading. Para elaborar el estudio se han analizado más de un siglo de datos y se ha investigado la Oscilación del Atlántico Norte desde 1920, cuando se identificó el fenómeno.
Los investigadores estudiaron tres ejemplos de este fenómeno: un período cálido, de 1931 a 1960; uno frío, de 1961 a 1990 y el inicio de un nuevo período cálido más reciente, desde 1990 hasta la actualidad.
El hallazgo más relevante descubierto por la investigación es la relación que existe entre el calentamiento del Océano Atlántico con un clima más húmedo de lo normal en el norte y el centro de Europa. El verano de 2012 fue el más lluvioso en cien años y sigue un patrón de lluvias de verano superiores a la media durante años.
En cambio, en el Mediterráneo, la subida de temperaturas del océano ha provocado veranos más calientes y secos. Las olas de calor anteriores también causaron veranos húmedos y graves inundaciones en Reino Unido en 1948 y en 1952.
Aunque la relación exacta entre la temperatura del océano y el clima aún no comprende completamente, los científicos saben que la temperatura superficial del mar en el océano calienta el aire, que afecta a los sistemas meteorológicos y sus recorridos. No se conoce la duración de estos períodos de condiciones más cálidas o más frías en el Océano Atlántico: varían mucho, entre 20 y 50 años.
Lo que sí ha quedado claro es que existe una clara relación entre el calentamiento del mar Atlántico y el hielo marino ártico y que el calentamiento global desempeña un papel crucial en el fenómeno.
La investigación, así mismo, sugiere que el patrón actual de tiempo es probable que continúe, ya que no muestra signos de enfriamiento. Quizá, con la ayuda de otras investigaciones, sea posible predecir estos ciclos con años de antelación.