Un planeta enfermo por el cambio climático es un lugar inhóspito para vivir, sobre todo para las poblaciones que acaban teniendo que abandonar sus hogares. Las cifras actuales de refugiados y desplazados no tienen precedentes, y las previsiones son terribles. Éstas van empeorando año tras año, tal y como confirma un nuevo informe de la ONU, que pinta un panorama desalentador para la próxima década.
En los próximos diez años aumentará de forma masiva la población mundial se verá obligada moverse para sobrevivir, revela un informe publicado por la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), titulado El Estado de los refugiados en el mundo, que abarca un análisis del periodo 2006-2011.
La causa de este problema no es otra que la suma de factores que lo provocan, y que van desde el cambio climático hasta las guerras, la inseguridad alimentaria o el crecimiento demográfico. Pero no sólo es su suma, sino también el aumento de la gravedad de cada uno de ellos. En concreto, el número de desplazados o refugiados internos ha aumentado de forma importante, con alrededor de 26 millones en todo el mundo, frente a los 15-16 millones que han cruzado las fronteras y otro millón de solicitantes de asilo.
Dentro de estos factores, el cambio climático es uno de los de mayor importancia por su interrelación con el resto, ya que ocasiona la reducción de recursos. Muchos de estos factores están unidos «al avance implacable del cambio climático.», y además «un número creciente de personas están siendo desplazadas por los desastres naturales, que aumentarán en número e intensidad», dice en el prefacio el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
A nivel mundial, el número de refugiados y desplazados en el mundo ha crecido sin cesar en los últimos años, un proceso que no tiene visos de detenerse en la próxima década. Todo lo contrario, las personas obligadas a dejar sus casas viviendo en su propio país, como desplazados, o en otros países, a modo de refugiados, aumentará de forma exponencial, según alerta el informe.
Las cifras que da el informe sólo llegan hasta 2010, por lo que no incluyen los movimientos que se hayan producido a partir de entonces, como en las revoluciones de la Primavera Árabe o durante las últimas crisis en Malí o Guinea Bissau o a consecuencia del conflicto sirio. Aún así, los datos dan una idea de la situación de emergencia en la que nos encontramos: casi 43 millones de personas en el mundo, en su gran mayoría habitantes de países en desarrollo, se han convertido en desplazados o refugiados durante el periodo estudiado.