En Estados Unidos se han producido este 2011 desastres naturales que han supuesto un coste sin precedentes en la historia del país. Una nación donde el porcentaje de ciudadanos, políticos y periodistas que defienden el escepticismo climático es peligrosamente alto que también sufre los azotes de sequías, inundaciones, tormentas, etc.
Las catástrofes climáticas han supuesto un coste sin precedentes de vidas humanas y dinero en 2011. Al menos doce grandes desastres naturales han causado más de mil millones de dólares de pérdidas, de acuerdo con los datos del National Climate Data Center de Estados Unidos. Aunque, si se tienen en cuenta los daños en los cultivos y otros factores, el número de grandes desastres debidos al clima llega a catorce.
La frecuencia de las catástrofes climáticas ha ido en aumento desde 1970. Y es una tendencia que va a continuar, de acuerdo con un reciente informe de Naciones Unidas elaborado por un grupo de científicos. El aumento de las temperaturas globales producirán más vapor de agua en el aire e intensificará las tormentas. El cambio climático también agravará el impacto de las olas de calor, las sequías y los incendios forestales.
Los incendios forestales que se produjeron en el suroeste del país norteamericano y arrasaron Texas, Arizona y Nuevo México fueron uno de estos desastres. Cinco personas murieron. Casi 3,7 millones de acres de tierra fueron asolados por el fuego. Hubo pérdidas en las propiedades, la madera y la agricultura. Sólo el fuego producido en Bastrop, Texas, quemó más de 1.500 viviendas.
El famoso Día de la Marmota trajo a la ciudad de Chicago un regalo inesperado y envenenado: una tormenta de nieve que dejó más de dos metros de nieve. Fue la nevada más grande en una ciudad. La tormenta afectó a treinta estados desde las Montañas Rocosas hasta el océano Atlántico. Además, 36 personas murieron y causó casi dos mil millones de dólares en daños.
Inundaciones
Las inundaciones del río Missouri (en la imagen de arriba), en junio, pusieron en peligro pozos de petróleo y la la planta nuclear de Omaha, que era una en una isla en medio de las aguas. La planta permaneció cerrada durante más de seis meses. La inundación hechó a perder miles de hectáreas de tierras de cultivo en Iowa. En Davenport, Iowa, los aficionados al béisbol no quisieron perderse el partido y entraron por una pasarela de casi trescientos metros instalada para ello.
Las inundaciones que se produjeron en el río Misisipi fueron aún peor: se anegaron 6,8 millones de hectáreas de tierras de cultivo entre los estados de Missouri y Louisiana. Las pérdidas económicas alcanzaron los cuatro mil millones de dólares. Al menos dos personas murieron.
Más del 55% del territorio de Estados Unidos experimentó sequías o lluvias extremas en este año 2011, la proporción más alta de la historia, de acuerdo con el National Climate Data Center. El promedio desde que se tienen datos es del 20%.
Sequía que se combate… orando
Exceso de agua y, también, falta de agua. Ha sido el año más seco de la historia de Texas. Muchas cabezas de ganado estuvieron al borde la muerte y los ganaderos decidieron enviarlas por tren a regiones con pastos más verdes. El Gobierno de Estados Unidos calculó que el 33% de la cosecha de algodón del país se perderá. ¿Qué solución dio el gobernador de Texas, Rick Perry, candidato presidencial republicano e hijo de un agricultor de algodón? Pedir que se rezara pidiendo lluvia al Señor.
Lo más destructor: los tornados
Se han producido, en 2011, 343 tornados en Estados Unidos. Once tornados fueron de categoría EF4 y cuatro fueron calificados EF5 (el máximo nivel). En total, 321 personas murieron. Los daños totales superaron los 10.000 millones de dólares.
¿Serán igual de escépticos los estadounidenses el año que comienza?