Robert Watson, científico asesor del Gobierno del Reino Unido y uno de los más prestigiosos expertos en cambio climático califica de utopía querer detener el aumento de las temperaturas siguiendo los objetivos de Naciones Unidas. Su opinión, por lo tanto, es que reducir el calentamiento global a 2 grados centígrados es poco menos que un imposible.
La reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero son claves a la hora de detener la escalada de temperaturas que están alcanzándose a nivel planetario. Precisamente por ello, puesto que las emisiones crecen sin cesar, su esperanza de limitar su aumento a una media del famoso par de grados centígrados es nula.
Sus predicciones son muy distintas. Partiendo de una denuncia a la falta de voluntad política, reflejada en las políticas nacionales y en los sonados fracasos de la práctica totalidad de las Cumbres ambientales, Watson sostiene que sólo se puede ser pesimista mientras no se tomen medidas drásticas para reducir las emisiones de dióxido de carbono. Según este experto, algo posible con tecnologías innovadoras que no impidan la recuperación económica.
En concreto, cree que «si seguimos por el camino hay una posibilidad de 50-50 de que lleguemos a un aumento de 3 grados«, afirma. Pero tampoco descarta que la cruda realidad nos lleve a subir 5 grados, lo que supondría un gran impacto sobre la salud humana, la inseguridad alimentaria y también sobre la pérdida de costas.
Recordemos que el objetivo de que el calentamiento global se mantuviese por debajo de los 2 grados centígrados se acordó en la reunión celebrada en el 2010 dentro del marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Por último el profesor Watson señala al Reino Unido y a Alemania como los países que deberían aumentar sus esfuerzos para lograr un tratado internacional efectivo.