Ninguna región del planeta se libra del cambio climático ni del calentamiento global. En el hemisferio norte y en el sur, en la costa, en el interior, en la montaña y en llanos y mesetas. Es un fenómeno global del que nadie se va a librar. Y lo que queda. Esto acaba de empezar.
El verano termina en el hemisferio sur y deja récord de calor. En Santiago de Chile, se ha vivido el verano más caluroso de los últimos cien años en la Región Metropolitana, según datos proporcionados por la Dirección Meteorológica de Chile. Durante este año 2012, la temperatura máxima media fue de 30,4 ºC, convirtiéndose en el más cálido del siglo, junto con el verano de 1989, ocasión en que también se registró esa misma temperatura.
Entre diciembre de 2011 y marzo de 2012, las temperaturas se elevaron en promedio hasta de 3 ºC sobre lo normal, explica Edita Amador, meteoróloga de la Dirección Meteorológica de Chile. Por otra parte, la media histórica de marzo fue de 27,6 ºC. Este año, en cambio, el mes comenzó con 33 °C y, durante las primeras semanas, se vivió una ola de calor que hizo que las temperaturas máximas se elevaran, sólo en los primeros ocho días, 6 ºC sobre la media. Así fue como la primera semana de marzo se registraron las temperaturas más altas de los últimos diez años.
El día más caluroso del verano se vivió el 14 de marzo, cuando los termómetros marcaron 35,2 ºC a las 17:30 horas, el máximo absoluto de los últimos cien años. A partir de esa fecha, las temperaturas comienzan a descender, paulatinamente, por la llegada del otoño.
Pero la capital no ha sido la única que ha vivido un verano de extremo calor. En otras regiones, como Valparaíso y del Maule, se alcanzaron altas temperaturas, con máximas de entre 32 y 36 ºC.
También han aumentado otros fenómenos meteorológicos extremos, como espectaculares tormentas eléctricas.