Además de las tensiones religiosas, políticas y étnicas que sufre Kenia, está el cambio climático, que no ayuda, precisamente, a mejorar la inestabilidad del país. Todo lo contrario, las cambiantes condiciones del clima están haciendo más difícil la supervivencia a sus habitantes, pero en esta ocasión se ha dado un paso adelante en combatirlo gracias a programas universitarios para poder hacerle frente.
En concreto, ha sido la Universidad de Nairobi la que intentará ayudar a los agricultores con la introducción de una maestría o posgrado y doctorado en el cambio climático. Su iniciativa es pionera en el continente africano, y supone un gran avance en la tan necesaria enseñanza a la ciudadanía para adaptarse a las nuevas condiciones climáticas.
Los pequeños agricultores y los pastores del país y también de otras zonas del África oriental serán los más beneficiados de estos programas, pues las temporadas de lluvia están cambiando y se producen tanto olas de calor interminables que derivan en sequías como inundaciones destructivas, con grandes pérdidas de cultivos y también de las actividades de pastoreo. Recordemos que el 80 por ciento de los africanos consiguen sobrevivir gracias a la agricultura de secano, justamente la que sufre el más grave impacto a consecuencia del imparable calentamiento global.
A partir de septiembre, la Universidad de Nairobi ofrecerá a estudiantes de todas las disciplinas cursos de Maestría en Cambio Climático y Adaptación que versará sobre los devastadores efectos que ya está ocasionando en toda África. Se hará un especial énfasis en la agricultura y la seguridad alimentaria pero, sobre todo, se caracteriza porque la teoría tendrá siempre un enfoque práctico, pues se analiza tanto la mitigación como la adaptación a sus consecuencias pensando en la manera de ayudar a los verdaderamente necesitados.