El invierno tardó en llegar, pero parece que no va a tardar mucho en irse. Según expertos británicos, ya están apareciendo los primeros signos de una temprana primavera en el Reino Unido, tanto en el campo como en los jardines de las casas. La culpa: el invierno extrañamente suave que se está viviendo en las islas.
Miembros de The Woodland Trust, una organización que lucha por conservar los bosques nativos en el Reino Unido y que todos los años publica un Calendario de la Naturaleza, en el que se pueden ver las señales de los cambios de las estaciones, han señalado que ya han visto campanillas y narcisos en flor y árboles como abedules, robles y avellanos que comenzaban a brotar.
Los campos ingleses están mucho más verdes que el año pasado, un año de intensas heladas que produjeron daños en cultivos y plantas. En cambio, este año, en enero, ya se entrevén los primeros signos de la primavera. La tendencia de unos inviernos suaves y húmedos va a ser la más habitual en los próximos años, según los expertos. En particular, ocurre en bosques, valles, arroyos laterales y laderas que están orientadas al sur.
Los avellanos han comenzado a brotar el día de Navidad, dos semanas antes de lo habitual, mientras que las campanillas de invierno se han visto, incluso en el norte, mucho antes de su aparición normal de febrero o finales de enero. También la celidonia, que normalmente comienza a florecer a finales de enero, ya ha comenzado a florecer en algunos lugares como Leigh Woods, cerca de Bristol. Por otra parte, en el sur de Devon, ya se ven ejemplares de silene dioica (red campion).
También los animales cambian su comportamiento: aves como petirrojos, tordos y zorzales ya están cantando como si se acercara la primavera. Las mariposas y abejorros también se pueden ver en fechas tan tempranas.
Todo esto, no sólo confirma que el calentamiento global es un hecho, sino que las heladas tardías pueden hacer mucho daño a algunas especies.
Según los registros de temperatura del centro de Inglaterra, sólo ha habido cuatro heladas en los últimos tres meses de 2011, cuando en 2010 hubo 35 y, entre 1878 y 2010, el promedio es de 15.