El portavoz de la Dirección General de Acción por el Clima de la Comisión Europea, Philiip Owen, ha presentado en Madrid la «Hoja de Ruta para una economía baja en carbono», un cambio de paradigma económico que requerirá una inversión de 270 billones de euros durante los próximos cuatro años, lo que equivale al 1,5% del Producto Interior Bruto (PIB) de la Unión Europea.
Según Owen, este presupuesto se asemejaría a los niveles de inversión anteriores a la crisis y estimulará el crecimiento económico en el sector de las manufacturas y de los servicios ambientales.
Es importante señalar que la inversión requiere un cambio de modelo económico y energético en Europa para cumplir los objetivos de reducción de emisiones marcados (20% para 2020, 40% para 2030 y 60% para 2040, respecto a los niveles de 1990). Además, supondrá un enorme ahorro en importaciones de combustibles fósiles (gas y petróleo) que la Comisión Europea calcula entre 175 y 320 billones de ahorro anual sólo en cuanto al petróleo.
Otro de los grandes ahorros que supondrá este nuevo modelo económico que la Unión Europea presentará a finales de año en la Cumbre de Cambio Climático de Durban (COP17), en Sudáfrica, serán los gastos sanitario y el destinado al control de la contaminación. Según cálculos de la Comisión, en 2050 se podrían ahorrar 88 billones de euros al año en esas dos materias. Así mismo, el mayor uso de las tecnologías limpias y de los coches eléctricos reducirán la contaminación del aire y habrá menos personas que sufran enfermedades provocadas por estos factores.
Owen ha señalado que, a partir de ahora, esta «Hoja de Ruta hacia una economía baja en carbono» marcará el diseño de las políticas europeas, fundamentalmente las relacionadas con la energía, la industria, el transporte, la edificación y la agricultura.