No son pocos los expertos, las empresas o los ciudadanos particulares que prefieren apostar por la eficiencia energética para ahorrar energía y contribuir a frenar el cambio climático. Es más barato y más fácil de llevar a cabo. No es necesario realizar grandes proyectos de energías renovables. Cada persona, en el ámbito personal, puede contribuir a ello.
Por ello, quizá las administraciones públicas deberían plantearse la posibilidad de impulsar iniciativas que tengan el objetivo de aumentar la eficiencia energética. Es cierto que muchas ya lo hacen. En ese caso, deberían mejorar sus políticas y dar aún más subvenciones y ayudas. Se ayudaría a combatir el cambio climático y a reducir los costes por la factura eléctrica. En una palabra, el mundo sería más sostenible sin espectaculares proyectos de ingeniería o grandes infraestructuras.
Según Charlie Wilson, del Centro Tyndall para la Investigación en Cambio Climático de la Universidad de Anglia Oriental (Reino Unido), las innovaciones para hacer un uso más eficiente de la energía tienen menos apoyo que las que buscan incrementar su producción. Y el futuro del planeta pasa, no sólo por desarrollar las renovables, sino, más aún, por gastar menos energía.
Subvenciones a los combustibles fósiles
En especial, las administraciones ignoran las pequeñas medidas de ahorro y eficiencia energéticas. Frente a los casi 400.000 millones de euros de subvenciones estatales que reciben los combustibles fósiles (no ya las renovables, ¡los combustibles que contaminan!) en un año o los 125.000 millones que se destinan a las renovables, desde 1974, la inversión pública en I+D para mejorar la eficiencia energética apenas llega a los 30.000 millones de euros, según datos de la Agencia Internacional de la Energía.
Ha sido publicado en Nature Climate Change un artículo en el que Wilson y un equipo de investigadores advierten de que se deben incrementar los esfuerzos para mejorar la eficiencia de los medios de transporte, los edificios o los electrodomésticos para frenar el cambio climático.
La inversión en la mejora de energías renovables debe continuar, por supuesto, pero también hay que tener en cuenta que dos tercios del dinero público para innovación en el ámbito energético se dedica a mejorar la oferta pese a que estudios científicos demuestran que la eficiencia es la mejor vía para mitigar el cambio climático.
Los investigadores han analizado tres áreas: la reducción potencial de emisiones de gases con efecto invernadero, los beneficios sociales, medioambientales y de seguridad energética más allá del cambio climático, y los avances tecnológicos. En todas ellas, la eficiencia energética es la mejor opción.
Después de 26 años de investigaciones estamos sacando a la luz pública un paquete de innovaciones tecnológicas muy rentables, con las que podemos lograr el Desarrollo Sostenible y evitar el Cambio Climático. Se trata de un sistema tecnológico integrado de: Transporte global, ecológico, multimodal por: Tierra, mar y aire, sin combustibles; y también de electrogeneración limpia a US$7/MW/h, y que además resuelve los problemas de falta de agua potable en todo el mundo. Queremos entregarle a la humanidad las patentes internacionales a través de una organización seria.
martinjaramilloperez@gmail.com