Alrededor del 44% de los productos agrícolas que se importan de Europa se prevé que sean muy vulnerables al calentamiento global. Una afección que se dejaría sentir ya en el horizonte del año 2050 por la mayor debilidad de los cultivos a la sequía, dificultando el comercio internacional. Café, cacao y soja son los principales afectados, según una nueva investigación.
El estudio
La investigación, publicada recientemente en Nature Communications, ha permitido cuantificar y cartografiar las vulnerabilidades climáticas transfronterizas de la economía agrícola y alimentaria de la Unión Europea en relación con la gravedad de la sequía en países no pertenecientes a la Unión.
El equipo de investigadores dentro del estudio ha realizado estimaciones para los años 2030, 2050 y 2085 en dos escenarios de bajas y medias emisiones. En ambos, se ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad, que se incrementa hasta el 44% con emisiones medias para el año 2050, mientras que en las bajas se reduce hasta el 40%. Esta diferencia del 4%, aunque inicialmente puede parecer pequeña, es realmente importante porque equivale a las importaciones por valor de 4.000 millones de euros.
El estudio también refleja que la gravedad de la sequía aumentará en un 35% en los lugares de producción de las importaciones agrícolas para el mismo año en relación a los niveles actuales.
Los datos vienen así a constatar que la vulnerabilidad del sector agrícola al cambio climático es cada vez más preocupante. Un motivo por el que el equipo de investigadores incide en saber qué cultivos pueden ser los más vulnerables a la sequía, entre otros problemas, y cómo cambiarán las vulnerabilidades en el futuro en comparación con las condiciones climáticas actuales.
Los productos
De acuerdo con los datos del estudio, los principales productos más afectados son los que procederán de países que presentan un alto riesgo de sequía como es el caso de Brasil, Indonesia e India. De este modo, en esta lista figuran el café, cacao, la caña de azúcar, el aceite de palma y la soja.
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