Un nuevo informe vuelve a alertar de los efectos del cambio climático, llamando la atención sobre cinco de 16 puntos de no retorno. Es decir, que están en un punto en el que la destrucción es inevitable, aunque el calentamiento global se detenga. Y no solo pone el foco en estos puntos. También avisa de que cada décima aumenta la probabilidad de que sucedan estos fenómenos. Pero, ¿qué puede suceder?
Los puntos clave
El estudio liderado por la Universidad de Estocolmo, en el que han participado varios centros como la Universidad de Exeter, indica la probabilidad de que haya hasta diez puntos de no retorno. Esto sucedería incluso en un escenario en el que el calentamiento del planeta se limitase por debajo de los dos grados centígrados desde los niveles preindustriales.
Dentro de estos puntos, cinco de ellos se habrían activado ya en un escenario de calentamiento actual de 1,1 grados centígrados. El primero de ellos está relacionado con la disminución de las capas de hielo de Groenlandia.
El segundo alude a la reducción de las capas heladas de la Antártida occidental, mientras que el tercero comprende el derretimiento abrupto del permafrost o suelo congelado en las regiones heladas.
Tras ellos, el estudio apunta al colapso de la convección del Mar del Labrador, un efecto que, además, es uno de los últimos que se ha detectado. Y, finalmente, en la quinta posición figura la muerte masiva de los arrecifes de coral tropicales.
Los puntos futuros
Aparte de estos puntos de no retorno, el informe indica los siguientes que podrían producirse a partir de los dos grados centígrados. En este grupo se encuentra la degradación total de la selva amazónica y el colapso de las cuencas subglaciales de la antártida oriental. Igualmente, se incide en la pérdida de glaciares de montaña en el cono sur de América.
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