Diversos estudios han puesto de manifiesto el impacto que puede tener el cambio climático en la alimentación de las personas. Un efecto que sumado a otros factores, como la sobrepesca, pueden llegar a afectar a las pesquerías locales de las que dependen millones de personas en todo el mundo.
El impacto
Esta consecuencia del efecto del cambio climático y la sobrepesca han quedado recogidas en un nuevo estudio que ha sido realizado por un equipo internacional de Reino Unido y Canadá, dirigido por científicos de la Universidad de Lancaster, y que se ha publicado en la revista Current Biology.
El estudio ha examinado más de 800 especies de peces en más de 157 países. Un análisis que ha puesto de manifiesto las afecciones de estos dos factores en la disponibilidad de micronutrientes vitales de los océanos.
Los pescados son una fuente importante de ácidos grados omega-3, hierro, zinc, calcio y vitamina A. Su carencia está vinculada con enfermedades como la mortalidad materna, el retraso en el crecimiento y la preeclampsia.
Una fuente para la que el cambio climático es la principal amenaza y más generalizada. De este modo, sus efectos alterarían el suministro de estos micronutrientes esenciales procedentes de las capturas de peces marinos. En concreto, se estima que esta amenaza sería una realidad en el 40% de los países analizados. La sobrepesca también afectaría, aunque en menor medida al observarse en los resultados una menor vulnerabilidad.
Zonas afectadas
Los países más afectados serían las naciones tropicales. Esto incluye Asia oriental y el Pacífico. En concreto, formarían parte de este grupo Malasia, Camboya, Indonesia y Timor Leste. Tampoco se escapa el continente africano con zonas como Mozambique o Sierra Leona.
Todos estos países serían los más afectados en sus pesquerías locales, lo que pondría en dificultades el suministro de los micronutrientes, viéndose favorecida así las deficiencias alimentarias.
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